Recordamos con nostalgia cuando en 2006 empezamos a leer sobre un sistema operativo basado en la nube llamado eyeOS, desarrollado cerca de casa y con una idea firme y clara, deslocalizar nuestro escritorio para no depender de un equipo físicamente.
En esos años donde las empresas se centraban más en no ser victimas de los virus Blaster, Sasser o Conficker se estaba empezando a desarrollar la idea de que un escritorio no debería ser algo físico hacia donde desplazarse sino que podía ser un lugar al que acceder desde cualquier lugar con una simple conexión a Internet.
El Cloud Computing o simplemente «La Nube» se ha convertido en los últimos años en el núcleo de atención de la Ventana de Overton de las empresas y con ello las tecnológicas hemos trabajado para ofrecer las mejores alternativas y adaptarlas lo mejor posible a cada empresa.
Entramos pues en el 2020 con la idea de utilizar estos nuevos recursos tecnológicos para abarcar toda la cadena de valor de las empresas, conectando y ofreciendo servicio ininterrumpido a todos los usuarios desde la simple idea de que la nube no existe, sólo son ordenadores interconectados, con mucha seguridad y alta disponibilidad.